BYD continúa pisando fuerte en Europa, y lo hace con un ambicioso plan de expansión que tendrá su próximo gran hito a finales de 2025: la llegada de su marca premium Denza, encabezada por un modelo que está llamado a convertirse en el coche eléctrico más sofisticado del grupo hasta la fecha. Hablamos del Denza Z9GT, una imponente berlina de más de cinco metros que, tanto por diseño como por tecnología, apunta directamente al corazón del segmento de lujo europeo.
Lanzada en China con gran éxito —acumulando más de 10.000 entregas en tan solo cuatro meses—, la Denza Z9GT se presenta como una shooting brake de gran tamaño (5,18 metros en versión eléctrica y 5,19 metros en híbrida enchufable) y estética afilada, diseñada bajo la batuta de Wolfgang Egger, ex Audi y Lamborghini. Su silueta es tan llamativa como sus especificaciones técnicas: este modelo puede configurarse con hasta tres motores eléctricos que, en conjunto, ofrecen una potencia combinada de 940 CV y permiten una aceleración de 0 a 100 km/h en apenas 3,4 segundos. Todo ello con una batería de 100,1 kWh que promete hasta 630 km de autonomía según ciclo CLTC.
La variante híbrida enchufable (PHEV) tampoco se queda corta. Combina un motor gasolina 2.0 turbo con tres propulsores eléctricos que suman 846 CV y logran una autonomía combinada superior a los 1.100 km, de los cuales hasta 201 km son en modo eléctrico. Sus cifras de aceleración no desentonan: 0 a 100 km/h en 3,6 segundos.
Pero lo más sorprendente del Denza Z9GT va más allá de la potencia: su tecnología de chasis y tren motriz trasero roza lo revolucionario. Equipa dos motores eléctricos independientes en cada rueda trasera que permiten maniobras como un giro sobre sí mismo de 360º, o un desplazamiento en diagonal tipo “modo cangrejo” al estilo de modelos como el Hummer EV. Todo esto gracias a una arquitectura de giro trasero que puede alcanzar los 10º por rueda, reduciendo el radio de giro a solo 4,62 metros, algo inaudito en un vehículo de estas dimensiones.
La suspensión neumática adaptativa, junto con unos neumáticos de hasta 21 pulgadas y un sistema de control de estabilidad que permite conservar el control incluso tras un reventón a 180 km/h, completan una base técnica que impresiona tanto en papel como en pista. Y sí, lo hemos probado: el Z9GT sorprende por su aislamiento acústico, su estabilidad en curvas rápidas y su comportamiento predecible, aunque algunos periodistas hemos echado en falta una dirección con más feedback y una dinámica más emocional.
El interior es otro de sus puntos fuertes. El Denza Z9GT ofrece un habitáculo digno de competir con los grandes referentes alemanes del segmento premium. Con una distancia entre ejes de 3,12 metros, el espacio trasero es sobresaliente, especialmente para las piernas. Los asientos traseros son reclinables eléctricamente, hay climatización cuatrizona, techo panorámico de dos metros y hasta una nevera en algunas versiones.
El puesto de conducción no se queda atrás, con tres pantallas frontales (hasta 17,3 pulgadas en la central), retrovisores por cámara y acabados que mezclan cuero, madera y materiales sostenibles con gran mimo por el detalle. Además, detalles como los cojines inflables en los asientos delanteros —que se hinchan lateralmente en curvas para mejorar la sujeción— o una guantera climatizada, demuestran el nivel de sofisticación al que aspira BYD con Denza.
Respecto al precio, desde la marca no han ofrecido cifras concretas, aunque sí han dejado caer que estará “por debajo de sus rivales de lujo directos”. Eso sí, teniendo en cuenta su precio en China (unos 50.000 euros al cambio) y los costes de importación y homologación, en Europa probablemente superará los 100.000 euros, posicionándose frente a berlinas como el Porsche Taycan, el Mercedes EQE o el BMW i5.
En definitiva, el Denza Z9GT no es solo el coche más avanzado de BYD hasta la fecha, sino un serio aviso para los fabricantes tradicionales europeos: la movilidad eléctrica premium ya no es un terreno exclusivo de las marcas alemanas. Y lo que viene desde China, viene con fuerza, con tecnología puntera y con un enfoque cada vez más afinado al gusto del cliente europeo. Habrá que esperar a finales de 2025 para conocer su precio definitivo y comportamiento real en nuestras carreteras, pero una cosa está clara: el Z9GT ha llegado para cambiar las reglas del juego.
