Prueba del Denza Z9GT

China no se conforma con competir: quiere liderar. Y eso queda claro en cada nuevo modelo que presenta BYD bajo su firma de lujo Denza. Su último lanzamiento, el Denza Z9GT, es una declaración de intenciones: una berlina de corte deportivo, tamaño XXL, repleta de tecnología punta y que promete sacudir el segmento premium en Europa antes de que acabe el año.

Presentado en el circuito de Vairano, en Lombardía, el Denza Z9GT se mostró ante los medios como una suerte de “shooting brake” de casi 5,2 metros de largo, con una estética elegante y poderosa. Aunque aún no está homologado para circular por Europa, se espera que su llegada se produzca en el último trimestre de 2025.

El modelo estará disponible en dos variantes: una híbrida enchufable (PHEV) y otra 100% eléctrica (BEV). La versión híbrida monta un motor térmico 2.0 turbo de 207 CV, acompañado por un motor eléctrico de 272 CV en el eje delantero y dos motores traseros de 299 CV cada uno. En conjunto, desarrolla una potencia combinada que supera los 870 CV, aunque la cifra exacta aún no ha sido homologada.

Por su parte, el modelo totalmente eléctrico alcanza los 965 CV gracias a un motor de 313 CV delante y dos de 326 CV detrás, alimentados por una batería LFP de 100 kWh. Su autonomía declarada es de 630 km según ciclo chino CLTC, lo que se traduciría en algo más de 500 km en homologación WLTP. El coche acelera de 0 a 100 km/h en solo 3,4 segundos, y alcanza una velocidad máxima de 240 km/h.

Pero lo que realmente diferencia al Denza Z9GT de cualquier otro coche del segmento es su tecnología aplicada al confort y la conducción. El vehículo puede girar sobre su eje delantero, moverse en diagonal gracias al sistema e³ Parking, y cuenta con un eje trasero totalmente direccionable y ajustable, capaz de colocar las ruedas en posición convergente o divergente, algo nunca visto en un coche de producción.

Además, destaca su suspensión neumática inteligente, capaz de compensar situaciones críticas como un reventón a 180 km/h. Así ocurrió durante una de las pruebas, cuando el coche perdió una rueda a alta velocidad y mantuvo el control sin apenas alteraciones en la carrocería.

El interior está cuidado hasta el último detalle: asientos traseros con calefacción, ventilación, masaje y reclinables, climatización personalizada con función de termo o nevera (-6ºC a 50ºC), pantallas de altísima resolución para retrovisores y cuadro de instrumentos, y un sistema de sonido firmado por Devialet. Todo apunta a que el precio superará los 100.000 euros, aunque la marca asegura que casi todo el equipamiento será de serie.

El sistema de infoentretenimiento se mueve con la fluidez de un smartphone de gama alta y la plataforma de 800 voltios permite cargas ultrarrápidas. Además, los puertos USB traseros permiten carga a 60W, y la base de carga inalámbrica delantera ofrece hasta 50W, con sistema antideslizante.

Denza quiere hacer ruido en Europa, pero no por volumen. Su objetivo es otro: demostrar de lo que China ya es capaz en el terreno del lujo automotriz, compitiendo de tú a tú con los mejores, sin complejos. Y con el Z9GT, desde luego, las cartas están sobre la mesa.

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